EMOCIONES DE INFERTILIDAD
Parece que no pasa nada, porque no estás
enferma, porque tu vida está bien.
Parece que no pasa nada pero pasa.
Pasa que te mueres por dentro que te
desgarras de dolor porque para ti no es posible lo que es normal para cualquier
mujer, lo que es únicamente dado a la mujer, engendrar vida.
Algo normal y tan natural como tener un
hijo, el impulso vital en su máxima expresión, ¿te es negado?.
Pero no pasa nada porque no estás
enferma porque tu vida está bien.
Pasa que te mueres por dentro, que te
desgarras de dolor, que no encuentras sentido a tu vida, comienzas
a preguntarte que es posible que hayas hecho algo malo. Pasa que a veces desearías no estar.
Pero no pasa nada porque no estás
enferma porque tu vida está bien.
Y mientras te vas hundiendo más y más y
con el tiempo vas perdiendo la vida porque ya no puedes sonreír, porque una vez
más, tras otra prueba, otro intento, tras otro año, otro año y otro año y otro
año y otro año, ves como la vida surge fácilmente a tu alrededor y tu mientras vives en una contrarreloj, luchando contra tu edad, tu mente, tu tristeza y tu
instinto biológico más profundo.
¿Cómo crees que se puede sentir un
pájaro que no puede volar, un caballo que no puede galopar, cómo se siente una
madre que no puede engendrar? SUFRIENDO, SUFRIENDO...
Pero no pasa nada porque no estas
enferma, no te falta un hígado, no te falta nada, aunque te desgarras de dolor
día tras día y tu tristeza es tan profunda que se apodera de tu vida.
Pero aunque te mueres por dentro no pasa
nada, no estas enferma, porque tu vida está bien.
FERTILIDAD CONSCIENTE
FERTILIDAD CONSCIENTE
Diana Nieto Blázquez © Copyrigh
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